La erosión dental se produce en la capa exterior del diente, el esmalte, cuando entra en contacto con
sustancias con alto contenido ácido. Cuando este tipo de sustancia no es eliminada de la boca, bien sea
expulsándolo, o bien mediante higiene dental, los agentes químicos encontrados en dicha sustancia, varían
el pH de la saliva, lo que propicia la el desgaste del esmalte.
Por lo general, influye el tipo de hábitos alimentarios y de vida que cada individuo tenga; pero, en
ocasiones, también puede sufrirse por sustancias ácidas generadas por el propio organismo a causa de
ciertas enfermedades, un ejemplo sería la recogida por la Revista Española de Enfermedades Digestivas,
en cuyo artículo sobre la erosión dental, lo describen como consecuencia de la enfermedad por reflujo
gastroesofágico.
Síntomas.
Los síntomas que nos pueden indicar si padecemos erosión dental son bastante reconocibles:
• Decoloración de la pieza dental: la dentina se ve afectada por las sustancias químicas de esta
alteración dental, por lo que el tono del diente se convierte poco a poco en un tono más
amarillento.
• Sensibilidad dental: a causa de la exposición de la dentina, el diente aumenta su sensibilidad frente
a la acción de agentes nocivos, se suele incrementar en alimentos con altas o bajas temperaturas y
comidas altas en azúcar.
• Dientes más pequeños: dada su erosión, al disminuir el esmalte, el diente aparenta una forma
redondeada por lo que visualmente dará la sensación de que son más pequeños.
• Hendiduras o grietas: a causa de su pérdida de tonalidad, pasan a ser más cristalinos por lo que
mostrarán pequeñas grietas y hendiduras en la parte externa del diente.
Tipos de erosión dental
Según de donde provenga la sustancia ácida que causa la erosión dental, encontramos dos tipos de
erosiones diferentes:
Erosiones Endógenas.
Son las causadas por los ácidos que se generan en nuestro propio sistema digestivo, como hemos
comentado antes, generalmente suele deberse a la enfermedad por reflujo gastroesofágico, además de por
patologías de tipo alimentario como, por ejemplo, la bulimia, por la cual la erosión se produce a causa de
los jugos gástricos residuales en la boca a causa de los vómitos sucedidos a causa de dicha patología,
donde la lesión se crea en la zona interna de los dientes.
Erosiones Exógenas.
De las más frecuentes, son las causadas por los hábitos alimenticios, según la comida y bebida que se
ingiera. Los pacientes cuya ingesta de refresco o zumos de frutas cítricas, sea alto, disponen de más
posibilidades de sufrir este tipo de alteración en la zona dental.
Tratamiento de la erosión dental.
Para aplicar un tratamiento óptimo, el dentista debe saber con exactitud la procedencia de la erosión,
encontrándose tres tipos de erosión según su gravedad.
• Grado I: la etapa inicial, simplemente se deben seguir unas pautas de prevención. Ello ayudará a
que se calme la infección sin riesgo de crear secuelas que propicien una mayor gravedad.
• Grado II: en esta etapa, la pérdida del esmalte se produce en una zona específica, dejando la
dentina ya expuesta. Para reforzar el diente, se deberá realizar una obturación o colocación de
carillas estéticas.
• Grado III: en este caso la situación es tan crítica que afectará a las piezas adyacentes, se
recomienda recomposición, endodoncia, incsutación o colocación de coronas.
Ten en cuenta que algunos de los síntomas, como por ejemplo el de la sensibilidad dental, se puede
confundir con otras dolencias o patologías, como la caries. Por ello, te pedimos que no te trates por tu
cuenta, acude a profesionales para evitar que perjudiques tus síntomas; en Clínica dental Ipsum te
esperamos con la sonrisa amplia y los brazos abiertos, para que luzcas una sonrisa fuerte y sana.